Día ocho

Citamos la selección de los capítulos 5 y 6 del libro de texto. Además ten en cuenta siempre la verdad como la premisa de este taller, y con esta premisa, suma la frase clave de estos días: Nos unen los pensamientos.

Capítulo 5: curación a plenitud

p.80 Los pensamientos se expanden cuando se comparten. Cuantos más creen en ellos, más poderosos se tornan.

p.86 La idea del Espíritu Santo (…) se expande en ti a medida que se la ofreces a tu hermano.

Lo que reconoces en tu hermano lo reconoces en ti (…) lo refuerzas (aplica para el ego también).

p.95 Los sentimientos (en tanto pensamiento desde la emoción), los que son de culpabilidad, son los que se perpetúan en el tiempo (desde el sistema familiar en tu ser).

Inducen miedo a las represalias o al abandono garantizando así que el futuro sea igual al pasado (repetimos o compensamos cada historia).

p.96 Mía es la venganza (Biblia), dásela al Espíritu Santo quien des-hace el error (con la expiación pedida).

De acuerdo con el ego "Castigaré los pecados de los padres hasta la tercera y cuarta generación" (es leída de forma literal), es castigo. 

Para el Espíritu Santo (…) supone que en las generaciones posteriores Él podrá re-interpretar lo que las generaciones anteriores habían interpretado mal.

p.99 Debo haber decidido equivocadamente porque no estoy en paz. (No hay importancia pues) Yo mismo tomé esa decisión, por lo tanto puedo tomar otra (nuevamente).

Capítulo 6: las lecciones del amor.

p.101 La proyección implica ira, la ira alimenta la agresión y la agresión fomenta el miedo (al futuro que no existe)

p.110 Lo que enseñas te enseña a ti. La única seguridad radica en extender al Espíritu Santo (…) A medida que ves su mansedumbre en otros, tu propia mente se percibe a sí mismo como inofensiva.

Tu salvación radica en enseñar lo opuesto de lo que el ego es.

p.122 Aprendes primero que tener se basa en dar.

Te has excluido a ti mismo del (reino) en tu pensamiento.

Evita percibir desde el juicio erróneo sobre la vida del otro. Es de tu vida que conoces, por lo tanto, sólo puedes mostrar tu camino.